lunes, 19 de marzo de 2018

Mujer Adamantium

Y quizá, algún día entiendas que te di lo mejor de mi, te quise como se quieren pocas cosas, te consentí, te dediqué letras que jamás nadie escribió, que te amé más allá de lo imposible… Pero nunca estuviste, nunca estuviste para mi …y sin embargo, siempre supiste como atarme: con tus gestos, tus palabras, tus mensajes a deshoras, que me llenaban de ilusión y, ¡tú sabías! pero tal vez, aunque no me querías, necesitabas que yo te quisiera.
Y eso es lo que más detesté de ti. Pero al fin y al cabo, nos quedan las noches de insomnio más bonitas de nuestras vidas.
Y ella le atravesó el pecho …porque entró en silencio, y salió violentamente.
La única manera de drenarte de mi cabeza, es escribiendo sobre ti. Pero no puedo escribir, porque me distraigo …pensándote.
Querer acostarse con una persona, no es lo mismo que querer despertarse con ella. Habrán personas que te alegren la piel …pero muy pocas el corazón
Ni yo necesito 5 cervezas para decirte que te quiero, ni tú necesitas irte tan lejos para saber que me quieres cerca. ...pero así somos.
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